Cuantos casos no hemos encontrado de falsos mendigos o de personas explotadas en la mendicidad. Por otro lado ¿es esto motivo suficiente para no ayudar a los demás?
Este video ofrece una respuesta a uno de los dilemas que más escucho cuando se habla de la caridad. Hay muchas personas que me han dicho (y con razón) que muchas veces la caridad hace a las personas más flojas, incentiva que vivan sin esforzarse o bien que es dinero que se convierte en alcohol y no en comida.
Creo que este video nos ofrece una interesante respuesta. Una buena manera de ayudar es comprar a un precio justo (o a veces incluso un poco más caro) a las personas que lo necesitan, pues así propiciamos que trabajen o busquen sus ingresos honradamente. Es también excelente caridad enseñar, apoyar para que las personas trabajen (con un sueldo justo) o se auto-empleen. Preferir productos que dan empleos dignos y evitar los productos de empresas que explotan a sus empleados o que apoyan a causas con las que no comulgas.
Claro, hay quien no entra en esta categoría; no podemos pedirle esto a los ancianos, a los huérfanos, a ciertos lisiados o a quienes atraviesan una crisis de salud y requieren ayuda y subsidio directo y urgente, pero en muchos de los demás casos, siempre será mejor enseñar a pescar que dar el pez.
Si te gustaría ayudar a organizaciones que enseñan a pescar, con gusto te puedo platicar de una de ellas. Yo no soy parte de esta organización, ni tengo beneficio alguno de ello, pero los conozco y sé el bien que hacen a la sociedad.
Deja una respuesta